Construcción de centro de formación

Nuestro modelo de acogida no solo busca cubrir las necesidades básicas de los niños, jóvenes, mujeres y adultos. Aunque en un primer momento sea lo más urgente, pretendemos hacerles crecer primero con valor como personas, enseñarles a educar sus emociones y luego formarse como profesionales. Vamos a construir un espacio de tolerancia y convivencia en paz, sin exclusiones, sin discriminación religiosa ni política. Nuestro centro será un ejemplo de fraternidad entre los distintos pueblos y etnia de África. Donde la riqueza cultural de la región y la capital de Luanda, sirvan de estímulo y ejemplo para las distintas tribus. Con el objetivo de que los niños, jóvenes y mujeres se conviertan en mejores personas y profesionales.

Este primer proyecto está dirigido para las personas más desfavorecidas, donde la necesidad de ayuda es muy elevada. Debido a la falta de posibilidades para pagar cursos acreditativos, formación privada o simplemente que se den condiciones óptimas para que los niños puedan asistir a la escuela. Vamos a cambiar un fracaso anunciado por un futuro abierto, que les permita formar parte del sector de la población más dinámico de continente de África. Queremos que se convierta en un modelo de éxito en la lucha contra la injusticia y el derroche humano, social y económico.